“... entenderán una vez más, por que los antepasados consideraban la pirámide como el portal hacia las estrellas y como la forma a través de la cual las inteligencias estelares vienen a servir a la creación humana. Una vez más el hombre entenderá como las geometrías de la pirámide conjugan el espacio, el tiempo y la materia para formar el foco ideal para la transmisión de energía estelar.”
Pirámide del Sol, Bosnia 2012
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“... Regina observó una especie de pequeña lámina de color negro, colocada casi exactamente en el mismo lugar en que realizara el ritual; levantándola del suelo la examinó con detenimiento. - Parece ser un pedazo de mica - opinó.
- En otras partes de Teotihuacan se han encontrado también pedazos así de mica - dijo Don Uriel.
- Son de la época de endenantes - afirmó Don Simón - de cuando estaba la primera pirámide, la que hicieron los gigantes.
Naiden sabe pa' qué se utilizaban.
- Presiento que ya no debe estar aquí - aseveró Regina con dubitativo acento -, que era solo para el tiempo en que estaba apagada la pirámide.
- Pues llevatelo - opinó Leticia -. Al fin que no te vamos a denunciar como saqueadora de piezas arqueológicas.
- Muy bien - concluyó Regina con alegre sonrisa -, lo conservaré como recuerdo de este día.
Luego de echar los últimos vistazos a diferentes rincones de la caverna, el grupo emprendió el camino de regreso. En cada uno de los muros existentes a lo largo del túnel volvieron a colocar las piedras que habían quitado al pasar. El hecho de que tanto Don Uriel como Don Simon dominasen a la perfección las técnicas de la albañilería, les permitía realizar esta faena con gran prontitud y eficacia; en igual forma cuando llegaron al agujero que conducía al exterior repararon este para dejar todo tal y como lo habían encontrado.”
Trozo de mica recogido por Regina durante su visita a Teotihuacan en 1968
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“Fue durante este periodo de la segunda destrucción cuando Cayce, al hablar del desarrollo técnico de los atlantes, habla de «la piedra Tuaoi», «la piedra de fuego» y «los cristales», para describir una fuente de energía. Esta fuente de energía se convertiría en un elemento clave de la civilización atlántida, y fue responsable por último de su propia destrucción. Cuando le preguntaron acerca de la piedra Cayce respondió:
Tenía la forma de una figura de seis lados, en la que aparecía la
luz como medio de comunicación entre lo infinito y lo lo finito,
o como medio por el cual se producían las comunicaciones
con esas fuerzas de las que emanaban las energías,
como centro del que salían las actividades radiales que guiaban
las diversas formas de transiciones o de viajes durante
aquellos periodos de actividad de los atlantes.
Estaba dispuesta como un cristal, aunque de una manera muy
diferente a la habitual entre nosotros. No confundáis las dos, por lo
tanto, pues están a muchas generaciones de distancia.
Era en aquellos periodos en que se dirigían los aeroplanos,
Era en aquellos periodos en que se dirigían los aeroplanos,
o los medios de transporte:
aunque ellos, en aquellos tiempos, podían viajar por el aire, o por el
agua, o bajo el agua, indiferentemente. Pero la fuerza con la que se
gobernaban estaba en esta central de energía, o piedra Tuaoi
que era como el rayo sobre la que actuaba.
En un principio, era la fuente de la que procedía el contacto espiritual y mental
(núm, 2072-10, 22 de julio de 1940).
El significado de este pasaje parece ser que, en un principio, la llamada piedra o cristal Tuaoi era un medio para comunicarse con el reino espiritual en los primeros días de la historia atlante, cuando las gentes habían empezado a proyectarse en la materia. Más tarde se convirtió simplemente en una fuente de la que emanaba una gran energía, y entonces la llamaban «piedra de fuego» o «cristal terrible».
Otra lectura, que contiene una descripción detallada de la piedra de fuego o del cristal, me parece que es un intento por parte de un profano de describir un láser gigante. Pidieron a Cayce que ofreciera «una descripción de los conocimientos eléctricos y mecánicos de la entidad cuando estaba encamada como Asal Sine en la AtlántIda».
Como Siempre, Cayce relacionó en su respuesta las vidas anteriores con las oportunidades para los individuos en el presente:
Sí, tenemos las actividades de la entidad durante esa experiencia.
Como se indicó, la entidad estaba relacionada con los que trataban
con los aparatos eléctricos y con su aplicación durante la experiencia.
Y vemos que se trataba de un periodo en que existían muchas cosas
que ni siquiera hemos soñado en nuestra experiencia actual.
Sobre la: piedra de fuego que estaba en la experiencia se aplicaron
entonces las actividades de la entidad que se relacionaban tanto con
las fuerzas constructivas como las destructivas del periodo.
Sería bueno ofrecer cierta descripción de esto, para que la entidad
pueda comprender mejor cómo se generaban fuerzas
constructivas y destructivas por la actividad de esta piedra.
En el centro de un edificio, que ahora diríamos que estaba revestido
de metales aislantes, o de piedras aislantes; algo semejante al
asbestos con las fuerzas combinadas de la baquelita o de otros aislantes
que se están fabricando ahora en Inglaterra con un nombre que
resulta bien conocido para muchos de los que tratan con esas cosas.
El edificio sobre la piedra era ovalado, o una cúpula en la que se
podía producir o se producía una rotación, de modo que la actividad
de la piedra se recibía de los rayos del sol, o de las estrellas; era la
concentración de las energías que dimanan de cuerpos que están
ardiendo ellos mismos, con los elementos que se encuentran y que no
se encuentran en la atmósfera de la Tierra. La concentración a través
de los prismas o vidrios, como los llamaríamos en el presente, era de
tal modo que actuaba sobre los instrumentos que estaban conectados
con los diversos medios de transporte, por métodos inductivos; así, su
control era de un carácter muy parecido al control remoto por vibraciones
o instrucciones de radio en nuestros días aunque el modo de la
fuerza que era impulsada por la piedra actuaba sobre las fuerzas
motrices de los propios vehículos.
Había una preparación para que cuando se hiciera rotar la cúpula
se presentasen pocos obstáculos o ninguno a la aplicación directa a
los diversos vehículos que se debían impulsar por el espacio, ya fuera
en el radio de visión del ojo, como podríamos llamarlo, o dirigidos
bajo el agua o bajo otros elementos o a través de otros elementos.
La preparación de esta piedra sólo estaba en las manos de los
iniciados en aquella época y la entidad era uno de aquellos que dirigían
las influencias de la radiación, que surgía en forma de rayos invisibles
para el ojo, pero que actuaba sobre las propias piedras instaladas en
las fuerzas motrices: ya fuera en las aeronaves que se elevaban por
gases en aquel periodo, o dirigiendo los vehículos más de placer que
podían pasar mas cerca de la tierra, o lo que llamaríamos las naves
sobre el agua o bajo el agua.
Estas, pues, eran impulsadas por la concentración de los rayos de
la piedra que estaba colocada en el centro de la central de energía, o
casa de energía (como podíamos llamarla en el presente).
[En la lectura se dice a continuación que estas centrales de energía
estaban instaladas en diversas partes de la Atlántida. Por desgracia] ...
las hicieron funcionar a demasiada potencia; y produjeron el segundo
periodo de fuerzas destructivas para las gentes de aquella tierra,
y la tierra se disgregó en islas
(núm. 440-5, 20 de diciembre de 1933) .
Esta fuente de energía también se utilizaba para los tratamientos
médicos, del mismo modo que se utilizan los láseres hoy día
en ciertos tipos de cirugía: «A través de la misma especie de fuego
se regeneraban los cuerpos de los individuos, por la quemadura, a través de
la aplicación de los rayos de la piedra, de las influencias que llevaban
las fuerzas destructivas a un organismo animal.
De aquí que el cuerpo se regenerase a sí mismo con frecuencia,
y que permaneciese en aquella tierra hasta que llegó la destrucción.
(núm. 440-5, 20 de diciembre de 1933).
...”
...”
“Misterios de la Atlántida” - Edgar Cayce
La central de energía Atlante